Ni modo
A menos de 60 centímetros y no puedo agarrarte la pierna
por qué nací con garras tan ansiosas.
Creo que si mi cerebro tuviera boca volvería loco a todo mundo, incluyéndome.
A menos de 60 centímetros y no puedo agarrarte la pierna
por qué nací con garras tan ansiosas.
La enfermedad se puso a bailar en la cama
Pisa, narices, ojos; duele
Sólo quejidos salen de las sabanas
Baila al son de gotas de vómito y lágrimas cayendo
En un vals que ella misma tejió.
A bailado con las pastillas, la cápsula, la aguja con sangre; ya aburrió al doctor
Todos se divierten menos tú.
Semi cadáver aburrido
¡No te quejes, cállate y sigue vomitando!